# 4
La piel como frontera pero también como zona de intercambios; la condición animal de quien vive arrojado a la comunicación inmediata con su entorno, de piel a piel, cuerpo a cuerpo. Con un aire a fábula y una cadencia que avanza como un río, estos poemas inéditos de Victoria Ramírez ensayan la vida y las visiones de un puma, retratando con lucidez la ambivalencia de la identidad y la naturaleza, con sus inesperadas mudanzas de piel entre la presa y el cazador.
La piel de un animal
Armados hasta los dientes los pumas galopan con prisa se acercan al agua de la cascada lamen los resquicios de las rocas sedientos y absortos en su ambición se acicalan en manada y piden que el cachorro tire del anzuelo caza peces que se lleva a la boca los arrastra kilómetros con torpeza con su saliva los moja por primera vez siente placer en el acto de humedecer tan brillantes al sol arden los ojos como la estrella punzante de un espejo el cachorro se mira encandilado sabe que ese minuto de juventud no volverá a repetirse nunca*
El cachorro entumecido rasguña el suelo firme del acantilado afuera la intuición del invierno llega a helar los corazones recuerda su vida de lactante los lagos en deshielo claros verdes y turquesas cada vez más fluidos los témpanos achicándose como su fe en esos días soñaba con ser impostor ser al fin una piel de ciervo hostigosa como la savia bajo el alero de la ternura nadie podría encasillarlo jamás ni siquiera le darían un nombre sería puma y ciervo al mismo tiempo por eso recordaba sus mejores días planeando un futuro desde la quebrada el mar ampliándose y pocas islas blancas y afiladas como sus colmillos*
El cachorro apunta su ojo fino un día ve un manantial de ciervos que no saben qué camino seguir con quién copular en las noches han perdido la soga de la cordura y como robles se han quedado de fiesta hasta la madrugada más tarde encuentra un cervatillo que serpentea su cabeza cuando se ríe se hacen profundos inmensos agujeros de peligro ya está dice el puma el sol quema con tanta fuerza el viento arrecia el mar se agolpa la luna se desborda y hace fácil recordable el día del hallazgo ya está las nubes se eclipsaron se exprimieron en los países ricos nunca había sido tan feliz y tan infeliz al mismo tiempo estoy contigo y fuera de ti ya está ya está ya está*
Aunque se rompa aunque se quiebre (dicen: el invierno se ha alargado de una forma) aunque vibre la puerta su arco medio la fuerza expulsada de un animal aunque rasguñe o raye la madera (dicen: el invierno se ha tomado la casa)*
(Aunque se parta el lomo aunque se queme) (aunque el calor de las brasas no se distinga de la piel) (aunque no vuelva a amar como antes, una piel de ceniza) (aunque se duerma un día descalza y aparezca en un lago celeste) (aunque observe el cráter las piedras livianas y oscuras) (aunque con ellas mire el eclipse aunque se incendie los ojos) (aunque se cubra de escamas le corten la frente con un cuchillo) (aunque la hiera una palabra un adjetivo nunca usado) (aunque se inicie el monzón lluvias frecuentes y torrenciales) (aunque se vuelva insolente se extrañe de su terquedad) (aunque detrás de su voz haya otra y él le bese el oído le apriete el cuello) (aunque le quite el aire la inmovilice)*
El puma va por las lomas corre rápido prefiere la discreción la luz que entra y estrangula el día cada salpicadura de frío y de cordillera escarpada lo arrullan como la canción de cuna que repitió hasta el cansancio agradece ese amuleto felino permite que flote airoso como una nube de plata extraña la asociación libre de la manada el rumbo impredecible de sus deseos alguna vez celebró en familia la unión de tres témpanos desde arriba observaron en caída libre el corazón abierto de una ballena*
¿Pero cómo es el corazón de una ballena? trescientos kilos cuatro latidos por minuto ochenta litros de sangre ¿pero cómo suena el corazón de una ballena? como un enjambre
Victoria Ramírez Mansilla (Santiago, 1991). Ha publicado los libros de poesía Magnolios (Overol, Chile, 2019) y Teoría del polen (Provincianos, Chile, 2021), los cuales fueron publicados también en Argentina por la editorial Salta el Pez (2023). En 2016 obtuvo el Premio Roberto Bolaño y en 2017 el Premio Juegos Literarios Gabriela Mistral. Ha sido becaria de la residencia Macdowell en Estados Unidos y de la Fundación Pablo Neruda en Santiago. En 2019 y 2020 obtuvo el Premio Mejores Obras Literarias, categoría poesía inédita, que entrega el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio en Chile. Fue fundadora del colectivo de traducción y poesía Frank Ocean y ha sido parte de antologías de poesía en España, México, Argentina y Francia.