# 05

Ana Claudia Díaz

Si la velocidad es el movimiento exacerbado, entonces la poesía podría ser su opuesto: una detención en los pequeños detalles cotidianos que, pasados por el cedazo de la escritura, emprenden el vuelo imaginario hacia una dimensión desconocida. Es la invitación que Ana Claudia Díaz hace a partir de estas “vacilaciones”, poemas altamente condensados, casi haikus, que nos recuerdan que la poesía suele participar de un aquí-ahora, un presente detenido que, sin embargo, avanza a ritmo propio.

Ciertas vacilaciones sobre la velocidad

(extractos del libro Sinsépalo, 2022)



*


pisar con certeza
cruzar a la foto de la fiesta

celebrar el regreso en desorden
hacer de eso un ritual 
o una logia.


*


ningún corcel de la edad de bronce
ningún llanto

hoy los jeroglíficos se descifran 
en el vuelo del mirlo.




*


descubre, la forma de irrumpir
el esparcimiento del alba
de las vísperas del ocaso.


*


para resistir al sol 
y secarse en el esplendor 
de la marchita robustez
de todo lo que aparente estar 
cubierto por inercia, así

como el esplendor de la clemencia. 


*


lechuzas que están ahí
solo, como árbitros de la valentía.


*

rodando se mudan las bellotas
vanidosa manera de escapar.


*


entre los elefantes
que pisando abismos
se esparcen
en las entradas 
de los conventillos

una deidad, una alama
exhala una verdad
un salmo.  


*


una luciérnaga 
eterniza 
ciertas vacilaciones 
sobre la velocidad.


*


ahí
en los valles
donde crece el pan de flor
agua y trigo que se cuece en el horno.
el rastro que dejan las cosas
para adivinar lo que se juzga oculto. 


*


rulemán
cuando llueve
la langosta
entra en el humus de la tierra
y se convierte en gitana.


*


define tímidas tortugas 
encrespando un bostezo 
al recordar de niña 
el fulgor de un entramado.

*


un iris que ansía sol
amarillo el ruido del mar
niños sucios de yodo 
transparencia en la arena

eterno resplandor.

Ana Claudia Díaz (Buenos Aires, 1983). Ha publicado los libros de poesía Limbo (Pájarosló, 2010), Conspiración de perlas que trasmigran (Zindo & Gafuri, 2013), Una cartografía de la insolación (Club Hem, 2015), El hemisferio del lado en que quedamos (Baltasara Editora, 2018) y Sinsépalo (Huerga & Fierro, 2022 - Hemisferio Derecho, 2024); las plaquetas Vuelto Vudú (Pájarosló, 2009), La ecología de las poblaciones (Pájarosló, 2010), Al antojo de las anémonas (Color Pastel, 2011) y Tapera (Jámpster, 2020). En 2018 obtuvo la Beca Creación del Fondo Nacional de las Artes para su proyecto Yacer en el Tuyú, antología que reúne a poetas del Partido de La Costa y General Lavalle. En 2022 obtuvo la misma beca, junto a Micaela Paszco, para realizar Un puñado de arena. En 2017 su libro El hemisferio del lado en que quedamos fue ganador de la convocatoria que realizó la editorial Baltasara.

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